...And You Will Know Us By The Trail Of Dead, con todas las letras.
Tienen un nombre tan imposible de recordar como inconfundible. Nadie en su sano juicio rechazaría la abreviatura que se ha terminado imponiendo, pero seguramente ignorarían el tremendo significado simbólico del definitivo desprendimiento de palabras en su nombre. ...And You Will Know Us By The Trail Of Dead no es lo mismo que Trail Of Dead, o eso creí entender al verles en directo en el Paredes de Coura 2011. Tuvieron su momento, pero por desgracia, éste parece haber pasado ya. Voluntaria o no, su evolución marca un desinfle importante en las virtudes que les hicieron romper los moldes. SOURCE TAGS & CODES fue el momento: aquel en el que todas y cada una de las palabras simbolizaba un buen motivo para escuchar ...And You Will Know Us By The Trail Of Dead.
Al margen del cambio de componentes, y del progresivo cambio de estilo, a parte de que califiquemos este disco como post-rock, o incluso post-hardcore, y a los últimos como mero ejercicio de pop-pock alternativo, lo que más decepciona de su evolución es que, salvo el SOURCE TAGS & CODES, ninguno de sus otros Cds te marca realmente. No quita que sean buenos: hay un montón de discos que te entran despacio; que al escucharlos parece que tenemos puesto un impermeable, que todo nos resbala: cada nota, cada canción. Entré en este grupo por el So Divided y por el Worlds Apart, que te permiten apreciar la calidad del grupo; incluso generaron en mí deseos de verles en directo. Y ya ahí me llevé el primer chasco.
Fotos de Pablo Luna Chao, Paredes de Coura 2011.
Pero es que el SOURCE TAGS & CODES sí que te marca: sí que reconoces, desde el mismo instante en el que suena por primera vez, cada nota, cada canción. Como si ya las conocieras de antemano; como si siempre hubieran estado ahí, agazapadas en tu mente esperando a que tu mano sobre el play las iluminara, las despertara. Con buen oído y paciencia te gustarán los demás discos, porque son buenos: como esos platos ultracondimentados tan ricos de los restaurantes.
Pero este es otra cosa: no valen la paciencia ni la espera. Es ya, es todo a la vez. Es un torrente, no de intenciones, sino de actos. Un boceto hecho en directo, inmediato, sin preparación alguna: de ritmo voraz, parece haber nacido fruto del primer ensayo, como si fuera el discurso apresurado e improvisado de quien no ha dicho nunca nada, y a la primera, lo suelta todo de golpe, sin pensarlo; sin pensar que es toda la verdad, sin rodeos ni subterfugios. Son un chute de leche condensada; los macarrones con tomate improvisados que, a las 6 de la mañana, cuando llegas borracho a casa, te saben a gloria, justo a lo que tú querías comer. Aquí sí que son ...And You Will Know Us By The Trail Of Dead, con todas las letras.
It Was There That I Saw You abre el disco con salto speedico de la cama, un impulso fuerte de electricidad, se da un respiro y, con el mismo salto, con la misma zancada, empieza a caminar; paso a paso, canción a canció; siempre firme y voraz. De esta primera piensas que es un temazo, pero con Another Morning Stoner sabes ya que es un discazo. Cada redoble está en su sitio, y te parece que siempre han estado allí, clavados, de un solo certero y preciso golpe. Conrad Keely y Jason Reece se intercambian guitarra, batería y la labor de cantante, pero me da igual quien hacía qué en esta canción: parace que a cada uno le sale del alma lo que suena de cada instrumento.
Homage ya es casi un escupitajo de rock duro, tan primario que conecta directamente con el tuétano de nuestros sistema óseo. Las baquetas son tibias de algún homo habilis que cedió su cuerpo a la ciencia. Quizá por eso luego nos parece tan cálido el redoble de How Near, How Far, su bajo escalador, y el envoltorio agudo de las guitarras, que pugnan en la sombra por ver cual de las dos te consuela mejor. Ésta, Heart In The Hand Of The Matter y Moonson son las que más se parecen a lo que harán más adelante; pero aquí resulta sorprendente, y enriquece el Cd. Después, solo es la letanía de un estilo personal asentado y cómodo.
En Moonson ya vas entendiendo que la fiera se ha calmado. Incluso su final, parecería el perfecto final para un disco corto. Pero entonces llega Days Of Being Wild, como aquel inflexible Brezhnev, que volvió a proyectar la sombra funesta de su mano de hierro sobre la URSS, tras el pequeño interregno de Jrushchov, y su proyecto de desestalinización. ...And You Will Know Us By The Trail Of Dead son rama dura del PCUS en este álbum, y vuelven a la carga tras una leve relajación.
De todas formas, el final del Cd parece tener una naturaleza distinta a la del principio. Parece que ha mutado durante su escucha, bajo nuestras propias narices. Days Of Being Wild era un espejismo, la última palabra del discurso de la bestia. Acaba por imponerse un rock más sosegado, ácido igualmente, pero más estático y moldeado. Relative Ways y Source Tags & Codes son la velocidad de crucero adecuadas que ha dejado la inercia de esos primeros impulsos, casi irracionales. Lástima que luego esa fórmula resulte caduca.
SOURCE TAGS & CODES es un disco que no deja indiferente a quien esté dispuesto a oírlo. Es un estilo estridente, directo, aguerrido, y puede no gustar a mucha gente de buen gusto; lo entiendo. Pero a las esponjas auditivas como yo, estoy seguro, les impresionará la intensa claridad de la idea de rock que estos señores tenían en 2002.
Fotos de Pablo Luna Chao, Paredes de Coura 2011.